Ayer se llevó a cabo el 11° Concurso Nacional de Estatuas Vivientes organizado por la Universidad de Ciencias Sociales y Empresariales. Estatuas de todo el país se tomaron una cuadra de la calle Paraguay en el centro porteño y se dejaron querer y admirar. No es ningún secreto, pero para quien no lo sepa hace mucho que yo quiero ser una estatua viviente y, de hecho, ya tengo mi personaje y el vestuario.
Las estatuas me fascinan y, especialmente, en Buenos Aires hay algunas muy buenas y creativas. El concurso de ayer fue sólo una muestra pero en un fin de semana, en alguna plaza pública, es seguro que podamos encontrar alguna.
Por cierto… ¿Saben que mantenerle la mirada a una estatua es difícil?
Un comentario
Si, cuando llegaron unas estatuas vivientes aquí a Comitan, era mu difícil verlos fijamente… Por ejemplo, la estatua que vi, era la de un cartero, me pegó un susto cuando soplo su silbato